Según un artículo publicado en la revista " Nature Medicine " un compuesto químico usado en pacientes cardiacos aumentaría las posibilidades de supervivencia para las personas mordidas por una serpiente venenosa, este compuesto - el óxido nítrico - tiene la virtud de desacelerar el sistema linfático hasta en un 50 % retardando el tiempo que lleva al veneno de serpiente a ingresar en el torrente sanguíneo y con ese tiempo extra las víctimas tendrían mucho más tiempo para encontrar ayuda médica.
En la opinión de Dirk Van Helden, profesor en la Escuela de Ciencias Biomédicas de la Universidad de Newcastle en Australia: “ Cuando uno es mordido por una serpiente, las toxinas son moléculas grandes y pueden insertarse en los tejidos pero no pueden ingresar en los vasos sanguíneos por que son demasiado grandes. Por eso son tomadas por el sistema linfático, que las lleva al torrente sanguíneo “, explico Helden, “ la idea es cerrar el flujo linfático, lo intentamos y eso desaceleró drásticamente dicho flujo en ratas y tambien en humanos ”.
En este experimento los ratones que no fueron tratados con el ungüento que contenía óxido nítrico e inyectados con una dosis letal de veneno de serpiente murieron pasada una hora mientras que los que fueron tratados con dicha crema sobrevivieron durante 90 minutos, en los experimentos realizados con seres humanos, los voluntarios recibieron inyecciones inofensivas de tintura que contenía moléculas de aproximadamente el mismo tamaño que las contenidas en el veneno de serpiente.
Helden indicó que el óxido nítrico tuvo el efecto de desacelerar la acción bombeadora del sistema linfático lo que terminó disminuyendo el transporte de veneno al sistema sanguíneo.
El tiempo y las pruebas dirán si este hallazgo, meramente paliativo que no curativo hasta donde yo se, ya que retarda los síntomas pero no destruye el veneno, resulta más efectivo y menos problemático a nivel global y con todos los tipos de venenos u ocurre como en el caso del sistema del vendaje compresivo, que es útil para unos tipos de venenos y potencialmente perjudicial para otros.
A pesar de todo, sigo diciendo que resulta un descubrimiento magnífico y muy propio de los científicos australianos y sus siempre excelentes investigaciones sobre mordeduras de serpiente.
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